Durante la última reforma, la Agencia Tributaria hizo una rebaja en el IRPF lo que generó que durante el primer trimestre de este año, la recaudación haya descendido a 1.582 millones de euros.
De toda esta cantidad, 1.409 millones son parte de las retenciones en rentas de trabajo, mientras que 603 millones corresponden a la reforma aplicada en el año 2015. Los 429 millones restantes son los que se aplican de acuerdo al ejercicio del año 2016.
Esa reforma, se colocó unos meses antes para que entrara en vigor antes de las elecciones generales. El costo total se estima que llega a unos 9 millones entre el 2015 y 2016. Esto ha generado que el año pasado el IRPF fue de 4.813 millones.
Estas cifras no dejan más que marcar el hecho de que la recaudación de Hacienda ha hecho que ingresen menor cantidad de ingresos públicos en general.
Si se incorporan las partidas finales tanto de ingresos como de gasto, la recaudación ha disminuido en 1.097 millones de euros lo que da una explicación clara de por qué los recursos del Estado dejaron de crecer cuando al actividad económica no deja de aumentar llegando a un 3% mayor durante este primer trimestre.
Pero esto no se termina aquí. Se sabe que a partir de junio, cuando se empiecen a liquidar las cuotas diferenciales de IRPF y de los impuestos sobre sociedades el descenso será mayor.
Habrá que esperar entonces a ver qué sucede en el segundo trimestre del año para llegar a una determinación y saber exactamente cómo se enfoca el descenso de los ingresos públicos debido a la reforma del IRPF.